Al terminar la guerra, Europa había perdido su papel hegémonico en el mundo: Japón se iba adueñando progresivamente de los mercados de Asia oriental y extendía cada vez más su influencia política en aquella área del mundo . Estados Unidos se había convertido en la primera potencia, ya que poseía la mitad de reservas mundiales de oro y era acreedor de casi todos los países europeos : Wall Atreet y el dólar habían sustituido a la Bolsa de Londres y a la libra esterlina.Por otro lado, la sociedad europea quería olvidar los horrores de la guerra y se afanaba por gozar del instante, en lo que los historiadores llaman los años locos o felices veinte: se impusieron los artistas de las diferentes vanguardias, se generalizaron nuevos ritmos, como el jazz, el charlestón y el tango, y crecieron los movimientos de emancipación de la mujer, que reinvindicaron sus derechos civiles y liberalizaron sus comportamientos (falda corta, cabellos a lo garcon, etc.).
CARBAJAL R.
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